Diferencias entre la confitura y la mermelada

Hoy hablaremos de las diferencias entre la confitura y la mermelada.

La confitura es un producto que se elabora a partir de la pulpa de la fruta. Tiene consistencia gelatinosa.

La cantidad mínima de fruta que debe llevar es del 35%. Si su contenido es igual o superior al 45%, podríamos hablar de una confitura “extra”.

Los usos de la confitura son muchos y muy variados. Ya sea untadas en rebanadas de pan y como acompañamiento de postres, como para rellenar postres, como por ejemplo los bizcochos. También puede utilizarse para aromatizar el queso blanco o el yogur. Preparar salsas de postre es otro de sus usos. Incluso, en otras ocasiones, pueden utilizarse para acompañar ciertas carnes o piezas de caza.

En Campo Bética contamos con dos tipos de confituras:

• Rellenables, es decir, aquellas que se utilizan para los rellenos de los postres. Disponibles en diferentes sabores: Albaricoque, fresa o naranja.
• Por otro lado las horneables, aquellas que sirven tanto para el relleno como para la cobertura del postre. En los sabores de Fresa y naranja.

Pero no todo el mundo sabe las diferencias entre la confitura y la mermelada.

La mermelada se fabrica a partir de fruta natural. A esta fruta se le añade azúcar según los porcentajes de cada receta. Se deja reposar estos dos ingredientes juntos hasta que el azúcar se empape de la fruta. Más tarde se disuelve, y esto se hierbe y al final se rellenan los tarros de mermelada. El porcentaje varía entre un 52% y un 60% de fruta y un 40% y un 44% de azúcar. El resto de ingredientes son los conservantes.

En el caso de la confitura el procedimiento es prácticamente igual. La diferencia más reseñable es que el contenido de fruta es un poco diferente. La otra diferencia es que en lugar de añadir azúcar se le añade almíbar, es decir una mezcla de azúcar y agua.

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